Toma de decisiones

Es indiscutible que la vida se basa en las decisiones que vamos tomando. Es por tanto obvio que la toma de decisiones juega un papel primordial en el desarrollo de nuestras vidas. Estas decisiones pueden llevarnos al éxito o al fracaso. Entonces, ¿si somos conscientes de la importancia de las decisiones porque no mejoramos nuestra toma de decisiones?

Es decir, antes de tomar una decisión hay muchísimos factores que se deberían tener en cuenta, como el entorno, situación, personas que pueden verse afectadas, conocimiento, preparación, actitud, proactividad, etc.

Uno de los apartados más interesantes del Mentor Harvard – Toma de decisiones, en mi opinión, es la de manejar los prejuicios cognitivos. Estos prejuicios o distorsiones de la realidad pueden hacernos tomar decisiones rápida e inconscientemente basadas en experiencias pasadas y nos puede llevar directo al fracaso. En muchas empresas se puede apreciar este caso, es decir, cómo una campaña publicitaria para el producto X fue un éxito absoluto, la campaña publicitaria para el producto Y es la misma, pero esta no tiene el mismo impacto y repercusión en la sociedad como la anterior. Esto se debe a que las características y tiempo son distintos entre un producto y otro, por tanto, no se ha tenido en cuenta los cambios en el entorno y la situación para la segunda campaña publicitaria.

También me pareció destacable el tema de los vínculos emocionales. Al estar España compuesta en su gran mayoría por pequeñas y medianas empresas, suele ocurrir que estas empresas son propiedad de alguna familia, y generalmente los propios familiares son los que dirigen la empresa, creo que este problema se agrava.

Lo que quiero decir es que muchas veces debido al vínculo emocional y junto a la afinidad con el status quo a muchas empresas les cuesta muchísimo hacer cambios importantes y significativos, como abrir nuevas líneas de negocio alternativas.

Además, no hay que olvidar que en toda toma de decisión hay un riesgo asociado. El riesgo puede ser de mayor o menor relevancia pero toda toma de decisiones puede ser mejor o peor. Siempre hay que tener en cuenta los riesgos de cualquier decisión, casi siempre solo se toman en cuenta las pérdidas económicas como supuestos riesgos ante una decisión que fracasa. Sin embargo, hay muchos otros riesgos asociados que son igual o incluso de mayor importancia que el tema económico, uno de ellos son las personas. Las personas pueden verse afectadas por la toma de una decisión. Ya sean trabajadores de la empresa, proveedores, clientes, accionistas, etc, estas personas pueden sufrir las consecuencias, tanto positivas como negativas.

Aspectos como la cultura de la empresa también tienen mucho peso en cuanto a la toma de decisiones. En la mayoría de las empresas la forma de trabajar ya esta totalmente establecida y no se hacen cambios al respecto, por lo que los procesos de toma de decisiones están muy definidos. Esto no debería ser así porque para cada decisión se puede afrontar de distintas maneras, ya sea por mayoría, unanimidad, consenso, etc. Creo que las empresas deberían ser más flexibles a la hora de decidir el proceso de toma de decisiones y que a lo largo de la vida en la empresa el sistema de elección de la toma de decisiones debe ir variando en función de los proyectos que vayan surgiendo.

Anteriormente, mencionaba a las distintas personas que pueden verse afectadas ante una decisión. Esto también se refleja en si la decisión ha sido tomada individualmente (por el jefe) o grupalmente. El hecho de tomar una decisión en grupo puede suponer muchas ventajas, la primera es que al ser más personas hay más perspectivas y puntos de vista diferentes por lo que se puede tener una visión más general y amplia de la situación y sus posibles soluciones. También es importante el reconocimiento y satisfacción que pueden sentir los empleados al ser incluidos en la toma de decisiones, ya que esto se puede ver reflejado en su satisfacción laboral, desempeño, productividad, esfuerzo y compromiso.

Por tanto, con todo lo expuesto anteriormente considero que deberíamos mejorar los procesos o métodos de toma de decisiones en nuestro día a día, y sobre todo en las decisiones que sean más estratégicas y a largo plazo.

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