¿Qué oportunidades de negocio ofrece el metaverso para la venta de productos?

La realidad aumentada y la realidad virtual nos acercan un nuevo horizonte donde las relaciones personales y comerciales se verán estimuladas hacia escenarios completamente novedosos. Según palabras de Mark Zuckerberg, «el metaverso es la máxima expresión de la tecnología social» y eso, sin duda, traerá una grandísima oportunidad para desarrollar creativas e innovadoras formas de comprar y vender. 

En un mundo paralelo, virtual e intangible podemos imaginar cualquier cosa. Los límites de lo accesible se eliminan y con ello las barreras hacia conseguir ser quienes deseemos ser. En un entorno como el metaverso, el usuario puede hacer lo que imagine de una forma mucho más fácil y sencilla que en el mundo real, un estímulo que consigue maximizar la predisposición de cualquier usuario a pertenecer al metaverso e invertir tiempo y recursos en ello. El beneficio es muy valioso: ser y conseguir lo que siempre hemos deseado y nunca hemos podido lograr en el mundo real. 

Una vida totalmente paralela y sin descanso

La desconexión no existe en el metaverso. Estés presente o no lo estés de manera real, la vida seguirá su curso de forma paralela. Es algo parecido a lo que ocurre con las redes sociales actuales, que generan un sentido de urgencia y de miedo a perderse algo mientras no estamos online. Sienta las bases para que llegue una nueva economía digital y acapare una atención vital para su rápido y continuado crecimiento. 

Todo esto es verdaderamente interesante para las marcas: un espacio paralelo donde poder obtener nuevos resultados de manera constante mediante la vinculación a un mundo virtual; un lugar donde poder comprar, vender, publicitarse, alquilar o construir nuevos elementos intangibles, pero que aporten un valor emocional a los usuarios. 

¿Qué oportunidades de negocio ofrece el metaverso?

Es el futuro de Internet y, por ello, llaman poderosamente la atención cuáles serán las verdaderas oportunidades de negocio dentro del metaverso. Nadie desea quedarse atrás y muchas son las compañías que quieren adelantarse al resto para iniciar una andadura que no sabemos dónde llegará, pero sí vislumbramos que tendrá un largo recorrido. 

Sobre todo, el paso del mundo virtual al mundo real es un gran aliciente para las marcas. Aunque son escenarios distintos, paralelos entre sí, el salto de uno a otro determinará las relaciones entre usuarios y marcas. Vamos a comprobar cómo puede ayudar o penalizar lo que eres en la realidad versus lo que eres en el metaverso. La reproducción de las dinámicas cotidianas se verá reflejada aquí y eso puede tener una extensión entre los dos mundos que haga de las conexiones sociales un todo sin distinción. Para ello, las marcas deben armar estrategias sólidas, conscientes y sin fisuras. 

Las tiendas, los tokens o criptomonedas y los terrenos desempeñarán un papel fundamental. Donde se crea un nuevo mundo, quien adquiera los mejores emplazamientos tendrá un punto de partida de superioridad. Esta gestión de localizaciones dará pie a la apertura de tiendas virtuales, espacios para la publicidad o para la construcción de edificios y viviendas singulares. 

El arte, de la mano de los NFT (tokens no fungibles), será un activo muy interesante donde la creatividad será fundamental. Galerías, museos, exposiciones, tiendas… cualquier espacio para la relación social en torno a este mercado dará lugar a transacciones y operaciones virtuales dentro del metaverso. En definitiva, cualquier aspecto social proporcionará oportunidades de negocio dentro del metaverso: por ejemplo, en el sector de la educación, eventos, conferencias, fiestas… donde los usuarios puedan ser partícipes con sus avatares y desarrollar una vida virtual rica en interacciones. 

Conclusiones

Es un nuevo paradigma para usuarios y marcas donde habrá cabida para cualquier producto o servicio que se pueda digitalizar. La industria de la moda ya está creando colecciones exclusivas, como Adidas y su nueva línea para el metaverso. Además, la customización es clave, dejando un territorio abierto a productos y servicios como pueden ser tatuajes o peluquerías que personalicen los propios avatares de manera digital. 

Todo está por descubrir, con infinidad de oportunidades de negocio, pero solo los más rápidos, creativos e innovadores obtendrán el éxito en las primeras fases del metaverso. Es un mundo donde la gestión del dato también pasará a una nueva fase más importante, interesante y valorada por todas las marcas.