¿Urgente? ¿Obligatorio? ¿Por qué? Son las preguntas que se me vienen a la cabeza cuando me hablan sobre eso de «Pacto Social´´, cada vez se viene hablando más sobre este tema, y pienso que, la crisis sanitaria y económica donde estamos inmersos lo acelera todo, y esto de Pacto Social no iba a ser menos.
Lo que es claro, es que la situación social de nuestro país cada vez está más polarizada, más enfrentada y la crispación crece por momentos.
Hace unos días, tuve la suerte de asistir al On The Edge III, organizado por el MBM de ESIC, cuyos ponentes son extraordinarios, cada uno en su campo, se encontraba D. Fernando Seco, fundador de CESUR, D. Manuel Alegre, un autentico profesional del Derecho Laboral, D. Mikel Iturbe cuyo cargo es el de Director del diario El Heraldo y por último Dña. Ana Pastor Julián, Vicepresidenta Segunda del Congreso de los Diputados. Para comenzar, D. Fernando, afirmó que existe una tensión social en nuestro país y que ésta se ve reflejada en los medios, aunque destaca que, por suerte, esta polarización existente no es tan grande como en otros momentos de la historia, por otro lado Dña. Ana Pastor, confirma algo con lo que me siento totalmente identificado, en el S.XX, ya sufrimos posturas bastante enfrentadas y esto no nos llevo por buen camino, además añadió, que si hay problemas no puede existir la confrontación sino remar todos del mismo lado, algo que pienso que no vemos reflejado ni mucho menos en la Cámara Baja -Congreso de los Diputados- de nuestro territorio, asimismo, Dña. Ana, añade que deben de seguirse 3 premisas importantísimas para un buen diálogo, asumir las reglas del juego democrático, que exista pluralismo y por último, un pensamiento critico consistente, como ejemplo de ello, el proceso de Transición que vivimos -yo por mi pronta edad no lo viví- en nuestro país, tanta gente, con ideas tan distintas, llegando a un acuerdo por el bien de todos.
Por el contrario, D. Manuel Alegre, no piensa que la polarización esta tan agravada, y lanzó un claro mandamiento a los jóvenes, y es que debemos de esforzarnos en respetar con educación y argumentos al que no piense igual, hay que sobreponerse a la división, además citó al poeta neoyorkino Walt Whitman, “No seas prejuicioso, sé curioso”. Mikel Iturbe, piensa que la pandemia ha conseguido que se le de visibilidad a lo que ya ocurría, es decir, piensa que este enfrentamiento o polarización social, no es un fenómeno actual, sino que ya se venia viendo, además augura con esperanza, que esta situación es reversible y puede cambiarse.
Desde mi punto de vista, si tengo claro, que este pacto debe ser urgente y real, un pacto de verdad, no valen papeles firmados con el mismo valor de papel mojado, tenemos que centrarnos todos juntos en salir mejores, y eso empieza por un cambio en el panorama político, ellos mismos son los que tienen que mostrarnos que van a remar todos hacia la misma dirección, dejando las ideas a un lado por el bien del ciudadano, todo empieza ahí, en el ejemplo de los que mandan, cuando sea así y los ciudadanos lo veamos, la polarización y la crispación social podrá ser rebajada.
Cierto es, que en tiempos de crisis, y como bien afirmó Dña. Ana Pastor, es un campo abierto y amplio para los populismos, pero ahí es cuando hay que hacer la prueba del algodón y dejar de lado los discursos demagógicos, no decir a las personas lo que quieren escuchar, hay que acuñar una actitud totalmente responsable e incentivar a la población de un compromiso cívico y responsable. La riqueza de un país se construye de forma ordenada, y todos formamos parte de esa riqueza o ese éxito, ciudadanos, empresas y empresarios, sindicatos, políticos… Somos muchos y tenemos que ir todos a una centrados al mismo objetivo.
Creo que queda claro que hace falta un Pacto Social de forma urgente, pero un pacto que el respeto y la responsabilidad sean el sustento principal, que se centre en materia educativa, en como afrontar la deuda de la nación para generaciones venideras, en una separación de poderes real, aclarar el futuro de las pensiones, materia sanitaria, fortalecer el tejido productivo, asimismo, que este pacto se encuentre dentro del marco legislativo y de la Constitución Española.
Los jóvenes, somos -o eso dicen- la más y mejor generación, los más preparados y que más oportunidades hemos tenido, somos afortunados y esa fortuna hay que aprovecharla y, además servirla, hay que asumir la responsabilidad y no salirse de la jugada, somos el futuro y tenemos que liderarlo, esto no es una elección, en este caso es un compromiso ya que, el futuro se construye hoy.