Este verano, ESIC University es parte de los momentos que dejan huella

La universidad lanza su propuesta más fresca y emocional del verano con una activación experiencial en uno de los enclaves más exclusivos del sur de España: el Trocadero X ESIC Beach Club

Madrid, 8 julio de 2025 – ¿Y si este fuera uno de esos veranos que lo cambian todo? Bajo el lema “Hay veranos que marcan”, ESIC University da la bienvenida a la temporada estival con una campaña única que trasciende lo académico para adentrarse en lo emocional, en los instantes que conectan con lo que uno quiere ser.

La propuesta se materializa en ESIC Beach Club, situado en Trocadero Sotogrande, un espacio efímero donde la universidad se reinventa como punto de encuentro y celebración. Del 10 al 20 de julio y los días 5 y 6 de agosto, este exclusivo rincón frente al mar se convertirá en el lugar ideal para parar el tiempo, reconectar con uno mismo y con los demás, brindar con un cóctel inspirado en los sabores del sur y contemplar el atardecer.

Más que una campaña, una filosofía de vida

“Hay veranos que marcan” es una declaración de intenciones. Habla de los momentos que nos transforman, de las decisiones que nacen de una emoción o de una conversación inesperada. De esas pequeñas revoluciones interiores que suceden, muchas veces, cuando dejamos espacio a la calma.

Con un tono fresco y emocional, la campaña invita a vivir el verano desde la experiencia, con momentos que dejan huella y donde una marca puede convertirse en parte de tu historia sin forzarlo. ESIC University apuesta por estar presente más allá del recuerdo académico: en esos instantes reales, compartidos, que te marcan sin darte cuenta. Porque hay veranos que cambian cosas, y este puede ser uno de ellos.

Un verano para recordar… y compartir

Esta acción posiciona a ESIC University como una marca educativa que entiende el estilo de vida de sus estudiantes. Una institución que conecta con su comunidad no solo en el aula, sino también en sus momentos vitales más significativos.

Porque hay veranos que se olvidan. Y otros, como este, que te acompañan para siempre.