Las redes comerciales están siendo testigos de cómo las nuevas tecnologías modifican el comportamiento, los modelos de compra, la preferencia de relación y los estándares de satisfacción de nuestros clientes, que utilizan diferentes canales para obtener lo que buscan, son mucho más exigentes e informados y fieles sólo con aquellas experiencias de compra que cubran todas sus necesidades y expectativas.
Ya no basta sólo con estar presentes en nuevos canales, la estrategia comercial debe enfocarse en la interconexión de todos ellos en torno a una única experiencia de cliente.
La verdadera estrategia No-line Sales (eliminación de fronteras entre canales) es la que optimiza las necesidades de cada interacción (no sólo las de cada cliente) con los canales que la compañía dispone y alineada no sólo con la estrategia de atención, sino también con la corporativa. Un verdadero desafío para los Comités de Dirección, ya que obliga a importantes cambios en la estrategia comercial y en todos sus modelos de gestión.