“Lo hecho, hecho está”: Wallapop apuesta por un marketing que celebra las segundas oportunidades

¿Será por el marketing? El marketing nos hace mejores personas.

El 65% de los españoles ya adquiere productos de segunda mano de forma habitual. Este dato revela no solo un cambio en los hábitos de consumo, sino también en la forma en la que nos relacionamos con los objetos, con la sostenibilidad y con el pasado.

En ESIC creemos que el marketing no solo transforma marcas, sino que, como en este caso, puede transformar realidades. Y pocas campañas lo demuestran con tanta claridad como “Lo hecho, hecho está”, la última acción de Wallapop, desarrollada por MONO Madrid junto al creativo Jesús Revuelta.

“Lo hecho, hecho está” reivindica el valor de lo vivido

La campaña de Wallapop parte de una premisa sencilla pero poderosa: los objetos de segunda mano no solo siguen funcionando, sino que han sido parte de historias reales. Lo que ya ha ocurrido con ellos forma parte de su valor. Lo hecho, hecho está... y merece seguir adelante.

En palabras de María Calvo, directora de marketing de Wallapop:

“Queremos reivindicar el valor de dar una segunda vida a las cosas y celebrar lo que ya hemos vivido con ellas. Porque cuando reutilizas, también estás cuidando del planeta y participando en un consumo más consciente y responsable.”

Un enfoque que conecta con lo emocional

Con una pieza audiovisual de estética cuidada, emocional y cercana, la campaña nos presenta objetos cotidianos cargados de recuerdos: una cafetera, un sofá, una bicicleta. Cada uno con una historia que no termina cuando cambia de manos. Como resume Bitan Franco, Executive Creative Director de MONO Madrid:

“La mayoría de los objetos de segunda mano no solo siguen funcionando perfectamente, sino que guardan momentos únicos que merecen ser contados. Queríamos darles voz y mostrar que, aunque su primer capítulo ya se haya escrito, aún les quedan muchas páginas por llenar.”

Producción y ejecución: una narrativa al servicio de lo humano

La campaña ha sido dirigida por OCKHAM y producida por Garlic, con una ejecución técnica impecable que pone en primer plano la emoción y la autenticidad. Además del spot, la acción se ha desplegado en televisión, digital, redes sociales y exterior.

En esta última, los propios objetos se convierten en protagonistas con mensajes como: “Fui la cafetera de muchas mañanas bonitas” o “Fui el sofá de muchas charlas importantes”. Un enfoque creativo que nos invita a mirar lo material desde un lugar más humano.

El marketing como motor de cambio

Desde ESIC, celebramos este tipo de enfoques que muestran que el marketing con propósito no es solo una tendencia, sino una forma de construir un futuro más consciente, más sostenible y más empático. Porque comunicar bien también es educar en valores.

Y sí, tal vez, ¿será por el marketing que cada vez somos más responsables, más sostenibles y más humanos?